Los que aún están en la universidad tienen otras herramientas a la mano para evitar que los ataque este síndrome cuando salgan. No esperen el último día para hacerse la pregunta y ¿ahora qué? Esa interrogante lo pueden hacer desde el primer semestre o en décimo, con el ánimo de ir buscando el camino: aprovechen los trabajos prácticos de todas las materias y esos primeros contactos con las empresas. Igualmente, sáquenle el mayor partido a las prácticas empresariales. No olviden que muchos se enganchan con el mundo laboral en este proceso y que ustedes no son la excepción. Fuente: |